Corea del Norte y el Consejo de Seguridad de la ONU
Es difícil aceptar que la humanidad en su ilusorio camino de progreso y adelanto, se dirige ciega y empecinadamente hacia la catástrofe y la aniquilación de la raza. Y en esta carrera hacia la nada, aparecen países salvadores que en su deseo de hacer el bien no se han dado cuenta de tanto mal que se filtra de sus banderas.
El pasado 9 de octubre de 2006, Corea del Norte realizó un ensayo nuclear, que estremeció la tierra y volcó los ojos del planeta hacia uno de los países más aislados del mismo. Corea del Norte había sido matriculado en el “Club de los países nucleares”, hecho aberrante y despreciable desde cualquier punto de vista, que aviva los conflictos de años pasados en esta región oriental y puede verse como una presión al mundo para que levanten las medidas que pesan sobre dicha nación o una muestra de poderío militar como en la época de la Guerra Fría.
Sin embargo no centraré mi discurso al tema de las armas nucleares de Corea dejando claro mi posición en contra.
He optado mejor por preguntarme: cuál será el grado de autoridad moral que pueden tener los cinco (05) estados permanentes que conforman el Consejo de Seguridad de la ONU, encargado de mantener la paz y seguridad internacional, para proferir la resolución 1718, que declaró que las acciones norcoreanas plantean "una clara amenaza a la paz y seguridad internacional", en el entendido de que los cinco miembros permanentes de dicho Consejo, son precisamente las cinco potencias mundiales consideradas como nuclearmente armadas.
Para lo cual haré una síntesis de la relación entre cada uno de dichos estados con el desarrollo de las armas nucleares:
Estados Unidos: en 1945, arrojó dos bombas atómicas sobre las ciudades japonesas de Hiroshima y Nagasaki, generando una reacción en cadena autosostenida que originó la liberación de una enorme cantidad de energía en un espacio de tiempo muy corto. Formándose una onda muy brillante que desprendió enorme calor y radiación térmica y una inmensa ráfaga de aire, originándose incendios y una vasta destrucción, muriendo casi instantáneamente 100.000 seres humanos. Sin contar con la radiación nuclear, que sigue actuando después de la explosión y es extremadamente dañina a todo ser viviente
La Federación Rusa (antigua URSS): que probó su primera arma nuclear (“Joe-1”) en 1949, en un proyecto desarrollado parcialmente con espionaje durante y después de la Segunda Guerra Mundial. La motivación directa para el desarrollo de las armas fue la Guerra Fría.
El Reino Unido: que probó su primera arma nuclear ("Hurricane") en 1952. Su programa fue motivado para tener una fuerza disuasiva independiente contra Rusia y además era relevante en la Europa de la Guerra Fría.
Francia: que probó su primera arma nuclear en 1960, también como forma de disuasión independiente y para tener relevancia en la Guerra Fría
La República Popular de China: que probó su primera arma nuclear en 1964, para sorpresa de las agencias de inteligencia occidentales.
Se concluye pues, que los miembros permanentes del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas, uno de los seis órganos principales de la ONU, no son países pacifistas, por el contrario son países belicosos, y que en virtud a la Carta de las Naciones Unidas, pueden aplicar acciones coactivas que pueden abarcar desde la imposición de sanciones económicas hasta medidas militares, en casos establecidos de agresión o violación de la paz.
De lo que se colige además, que ni Estados Unidos, Rusia, el Reino Unido, Francia o China, tienen la más mínima autoridad para recriminar a otra nación por desarrollar armamento nuclear, ya que el uranio enriquecido colma sus bodegas y los misiles sus submarinos y portaviones. Tuviesen dicha autoridad si hubieran entendido desde hace mas de 60 años, cuando murieron tantos inocentes en Japón, que estas armas son una creación diabólica, que no traen soluciones sino destrucción y que terminarán con la raza tarde o temprano.
Finalmente quiero pensar que el no desarrollo de armamento nuclear de las demás 180 naciones que legitiman y dan autoridad a los 15 (quince) miembros del Consejo de Seguridad de la ONU, no se debe simplemente a la falta de dinero o recursos, sino a que hemos entendido, quizás, por estar como espectadores, que estas no son armas de guerra sino los tiquetes hacia la hecatombe del tercer planeta en orden del sol.
Por Eduardo Londoño Rodriguez
El pasado 9 de octubre de 2006, Corea del Norte realizó un ensayo nuclear, que estremeció la tierra y volcó los ojos del planeta hacia uno de los países más aislados del mismo. Corea del Norte había sido matriculado en el “Club de los países nucleares”, hecho aberrante y despreciable desde cualquier punto de vista, que aviva los conflictos de años pasados en esta región oriental y puede verse como una presión al mundo para que levanten las medidas que pesan sobre dicha nación o una muestra de poderío militar como en la época de la Guerra Fría.
Sin embargo no centraré mi discurso al tema de las armas nucleares de Corea dejando claro mi posición en contra.
He optado mejor por preguntarme: cuál será el grado de autoridad moral que pueden tener los cinco (05) estados permanentes que conforman el Consejo de Seguridad de la ONU, encargado de mantener la paz y seguridad internacional, para proferir la resolución 1718, que declaró que las acciones norcoreanas plantean "una clara amenaza a la paz y seguridad internacional", en el entendido de que los cinco miembros permanentes de dicho Consejo, son precisamente las cinco potencias mundiales consideradas como nuclearmente armadas.
Para lo cual haré una síntesis de la relación entre cada uno de dichos estados con el desarrollo de las armas nucleares:
Estados Unidos: en 1945, arrojó dos bombas atómicas sobre las ciudades japonesas de Hiroshima y Nagasaki, generando una reacción en cadena autosostenida que originó la liberación de una enorme cantidad de energía en un espacio de tiempo muy corto. Formándose una onda muy brillante que desprendió enorme calor y radiación térmica y una inmensa ráfaga de aire, originándose incendios y una vasta destrucción, muriendo casi instantáneamente 100.000 seres humanos. Sin contar con la radiación nuclear, que sigue actuando después de la explosión y es extremadamente dañina a todo ser viviente
La Federación Rusa (antigua URSS): que probó su primera arma nuclear (“Joe-1”) en 1949, en un proyecto desarrollado parcialmente con espionaje durante y después de la Segunda Guerra Mundial. La motivación directa para el desarrollo de las armas fue la Guerra Fría.
El Reino Unido: que probó su primera arma nuclear ("Hurricane") en 1952. Su programa fue motivado para tener una fuerza disuasiva independiente contra Rusia y además era relevante en la Europa de la Guerra Fría.
Francia: que probó su primera arma nuclear en 1960, también como forma de disuasión independiente y para tener relevancia en la Guerra Fría
La República Popular de China: que probó su primera arma nuclear en 1964, para sorpresa de las agencias de inteligencia occidentales.
Se concluye pues, que los miembros permanentes del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas, uno de los seis órganos principales de la ONU, no son países pacifistas, por el contrario son países belicosos, y que en virtud a la Carta de las Naciones Unidas, pueden aplicar acciones coactivas que pueden abarcar desde la imposición de sanciones económicas hasta medidas militares, en casos establecidos de agresión o violación de la paz.
De lo que se colige además, que ni Estados Unidos, Rusia, el Reino Unido, Francia o China, tienen la más mínima autoridad para recriminar a otra nación por desarrollar armamento nuclear, ya que el uranio enriquecido colma sus bodegas y los misiles sus submarinos y portaviones. Tuviesen dicha autoridad si hubieran entendido desde hace mas de 60 años, cuando murieron tantos inocentes en Japón, que estas armas son una creación diabólica, que no traen soluciones sino destrucción y que terminarán con la raza tarde o temprano.
Finalmente quiero pensar que el no desarrollo de armamento nuclear de las demás 180 naciones que legitiman y dan autoridad a los 15 (quince) miembros del Consejo de Seguridad de la ONU, no se debe simplemente a la falta de dinero o recursos, sino a que hemos entendido, quizás, por estar como espectadores, que estas no son armas de guerra sino los tiquetes hacia la hecatombe del tercer planeta en orden del sol.
Por Eduardo Londoño Rodriguez
2 comentarios:
Excelente artículo, una crítica muy bien estructurada!
Comparto su opinion, me parece que una de las razones por las cuales los instrumentos internacionales sobre derechos humanos no ha surtido los efectos deseados(paz, respeto por la dignidad humana,etc)es precisamente lo que esboza en su articulo, y es la autoridad moral que tienen los principales encargados de vigilar el cumplimiento de estos instrumentos. Ellos sancionan a otros estados por violaciones a los derechos humanos, por representar un peligro para la paz mundial.Pero cuando son ellos los responsables de los atentados contra los derechos humanos y la paz, nada pasa, es como si los grandes avances que ha tenido el mundo al consagar principios basicos de dignidad humana, de normas de compartamiento minimas en un conflicto, los cuales gozan de obligatoriedad mundial perdieran su eficacia y su pleno poder vinculante frente a los estados que usted bien nombra en el comentado articulo.
Termimo con una frase de Maiteya Buddha S.A.W. de su libro Educacion Fundamental "Hay muchos quienes han ganado el premio Nobel de la Paz, aun cuando tienen por su cuenta todo un cementerio"
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