Tristemente y con sorpresa encuentro jóvenes que a diario buscan copia en un salón, personas que los incluyan en un trabajo por dinero o por supuesta amistad o peor aun una buena nota que solo esta en sistemas de la U porque al final no aprendieron nada, esos son los profesionales que se están formando, personas que solo tienen un fin ultimo tener un diploma para llenar esa pared sucia de la casa a la cual nada le queda bien. Pero eso si se tildan de competitivos cuando en el fondo saben que son unos mediocres que a duras penas enredan al que no sabe.
Este es un llamado netamente humanístico porque quiero que independientemente de su religión, condición social o política piensen que un profesional se hace para servir a una sociedad humana no a maquinas productoras de dinero que si no me dan no doy, hagamos un alto y empecemos a servir para vivir, moviéndonos mas por la calidad humana y por el respeto que se merecen los demás por el solo hecho de ser humanos mas que por el dinero que resulta siendo necesario pero que al final es efímero.
Recordemos que somos seres sistémicos, por lo tanto, necesitamos unos de otros para subsistir, no nos dejemos llevar por esa indiferencia que tanto daño hace, por ese materialismo que a veces impide observar más allá de las narices, preocupémonos por ser mejores profesionales y personas cada día, así veremos que todo llegara sin necesidad de crueldad e indolencia.
Por: Paula A. Porras Muñoz
Este es un llamado netamente humanístico porque quiero que independientemente de su religión, condición social o política piensen que un profesional se hace para servir a una sociedad humana no a maquinas productoras de dinero que si no me dan no doy, hagamos un alto y empecemos a servir para vivir, moviéndonos mas por la calidad humana y por el respeto que se merecen los demás por el solo hecho de ser humanos mas que por el dinero que resulta siendo necesario pero que al final es efímero.
Recordemos que somos seres sistémicos, por lo tanto, necesitamos unos de otros para subsistir, no nos dejemos llevar por esa indiferencia que tanto daño hace, por ese materialismo que a veces impide observar más allá de las narices, preocupémonos por ser mejores profesionales y personas cada día, así veremos que todo llegara sin necesidad de crueldad e indolencia.
Por: Paula A. Porras Muñoz
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