viernes, marzo 23, 2007

EL QUE NO CONOCE LA HISTORIA ESTÁ CONDENADO A REPETIRLA




En nuestra evolución como raza, nos hemos encontrados con grandes personas que con sus ideas han tomado su poder en sus manos y han llevado ha diferentes pueblos a un desarrollo conjunto, por su parte otros “enloquecidos” con el poder cambian de idea y lo que inicialmente era bueno, termina siendo una completa dictadura con grandes daños y perjuicios para la humanidad; tal como aconteció en la bella isla de Cuba con la dictadura de Fulgencio Baptista en los años 50, que en su régimen, promovía el desarrollo de la isla con el turismo, que poco a poco se fue convirtiendo en la “madriguera” de los peores gángsters que se engendraban en las calles de New York y las Vegas en los años 50; en razón a ello fue que surgieron las ideas del ya conocido Fidel Castro, que junto al gran idealista Ernesto “Che” Guevara; promovieron una revolución dentro de esta sociedad en pro de un bienestar colectivo, que aun hoy a perdurado.

Lo que en este momento no pretendo es discutir si la dictadura cubana es buena o mala, lo que busco es referenciar los espacios en los cuales, la historia juega un papel tan importante que por todos los medios internacionales se busca que no se repita, ya que conocemos la historia, se encuentra allí, y nos persigue a cada paso.

Caso contrario que no conocemos o conocemos muy pocos, es la dictadura vivida en Uganda alrededor del año de 1971 es del dictador Idi Amin Dada también conocido como “la bestia negra”, “el dictador caníbal” o “el carnicero de África”; su dictadura duro solo 8 años, pero fueron suficientes para producir más de 300.000 muertos; era conocido por las atrocidades cometidas contra sus opositores, como la decapitación, desmembramiento e incluso canibalismo.

Vivió en el exilio y murió en Arabia Saudita; aun después de su muerte no se logró el castigo terrenal por la infinidad de atrocidades que provoco en su país; es por ello que se demuestra la necesidad de un sistema legal internacional en cuyo marco sean juzgadas las personas acusadas de genocidio y delitos contra la humanidad.

Esperemos que los dictadores no solo sufran con el fuego del infierno, esperemos que les llegue la justicia terrenal y no la divina.


Recomiendo para más ilustración, ver la película de este dictador llamada: El Ultimo Rey de Escocia.


Por: Cristian Alfredo Gómez

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Qué buen artículo!.

Definitivamente que lástima que un criminal de éstos al igual que otros, no hayan sido juzgados por la justicia terrenal, lo que indica que si bien ya tenemos un sistema penal internacional, aún no es lo suficientemente idóneo para efectivizar la justicia internacional, es necesario entonces,repensar en este sistema, dejar a un lado ciertas formalidades innecesarias con el fin que ésta sea eficaz, eficiente e idónea y para que no se vuelvan a repetir casos inauditos de esta justicia, en que con 600 personas al frente de la investigación de un solo caso, ésta por su lentitud no haya podido culminar en una condena,pues primero sobreviene la muerte del investigado

Anónimo dijo...

Con todo respeto, falta profundidad en su artículo, muy superficial, para hablar de ese tema con propiedad hay que conocer mucho. Creo que es de poca importancia y trascendencia